Lo mejor de Baviera

Baviera es más que solo el Oktoberfest. Sin embargo, cuando se habla del estado bávaro es inevitable nombrar a este festival, ya que es el más grande del mundo reuniendo a más de 6 millones de personas.  No sólo sus lugares famosos y sus festividades hacen de Baviera  tan fascinante, ya que aún se siguen preservando tradiciones y pasatiempos, como es el caso del juego de cartas Schafkopfen. Asimismo, la Asociación de Trajes Típicos  mantiene y conserva el cuidado de las tradiciones, la cual invita a los visitantes a forman parte del cuidado de las mismas. Esta convivencia bávara se ve reflejada bajo el lema “Vivir y dejar vivir”. Y por supuesto no puede faltar hacer una parada para disfrutar de la cerveza bávara y los pretzel.

Las diferentes festividades y los platillos típicos  con sus inconfundibles especialidades regionales forman parte importante de Baviera. Así como su diversidad cultural y sus diferentes dialectos que dan a cada provincia bávara su  propio encanto. Esta diversidad también se ve reflejada en sus siete provincias de gobierno, las cuales disponen  de sus propias competencias en materia de economía, ciencia, redes y educación.

Sin olvidar, que casi ninguna otra región une sus fortalezas económicas con sus bellezas naturales, como es el caso de Baviera. El estado se caracteriza por sus numerosos lagos, como el lago Chiem, Ammer, Tagernsee, Staffelsee, o el lago de Starnberg; así como de su imponente paisaje rodeado de montañas como la Zugspitze, la montaña más alta de Alemania. Así cada año más de cinco millones de personas son atraídas a los más 45 palacios, castillos y residencias del Estado, entre los cuales el famoso castillo del rey Ludwig II es uno de los recintos más populares.